La victoria del "obispo de los pobres" en las elecciones presidenciales del Paraguay, expande la ola de lideres izquierdistas a través de Latino América, lo que aisla aún más, a los pocos gobiernos conservadores que quedan.
Cuando fernando Lugo sea inaugurado en Agosto 15, los únicos gobiernos de inclinación derechista en Latino América serán, Colombia, El Salvador, y discutiblemente Perú, donde un partido populista de inclinación izquierdista, ha estado inclinándose gradualmente hacia la derecha.
"El triunfo del camarada Fernando Lugo es.......otra piedra en la cimentación de esta nueva Latino América, soberana e independiente, y porque no, socialista," afirmó el Presidente del Ecuador, Rafael Correa durante una visita a la nueva presidenta izquierdista de Argentina, Cristina Fernandez.
En una entrevista con La Prensa Asociada, a solo horas de haber derrocado al partido que por más tiempo ha gobernado una nación en el mundo, Lugo repitió su disgusto por etiquetas: "Yo no pertenezco a la izquierda o a la derecha."
Pero el ex Obispo Católico Romano había dicho, que la teología de liberación influenciada por el marxismo, inspiró su abogacía por los pobres y que su victoria claramente inclina a Paraguay hacia la izquierda del Partido Colorado, que había gobernado a través de dictadura y democracia desde el 1947, incluyendo los 35 años de brutalidad anti-comunista del Gen, Alfredo Stroessner.
Cuando fernando Lugo sea inaugurado en Agosto 15, los únicos gobiernos de inclinación derechista en Latino América serán, Colombia, El Salvador, y discutiblemente Perú, donde un partido populista de inclinación izquierdista, ha estado inclinándose gradualmente hacia la derecha.
"El triunfo del camarada Fernando Lugo es.......otra piedra en la cimentación de esta nueva Latino América, soberana e independiente, y porque no, socialista," afirmó el Presidente del Ecuador, Rafael Correa durante una visita a la nueva presidenta izquierdista de Argentina, Cristina Fernandez.
En una entrevista con La Prensa Asociada, a solo horas de haber derrocado al partido que por más tiempo ha gobernado una nación en el mundo, Lugo repitió su disgusto por etiquetas: "Yo no pertenezco a la izquierda o a la derecha."
Pero el ex Obispo Católico Romano había dicho, que la teología de liberación influenciada por el marxismo, inspiró su abogacía por los pobres y que su victoria claramente inclina a Paraguay hacia la izquierda del Partido Colorado, que había gobernado a través de dictadura y democracia desde el 1947, incluyendo los 35 años de brutalidad anti-comunista del Gen, Alfredo Stroessner.
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